El alimoche (Neophron percnopterus) es una de las especies más amenazadas del mundo, con una fuerte regresión en toda su área de distribución, que está cambiando su dinámica migratoria, en principio se trata de un migrante transahariano, que pasa el invierno entre Senegal y Mali, sin embargo, en los últimos años se ha instalado una población invernante en Extremadura, que supera los 125 ejemplares, en la zona de la Ribera de Fresnedosa (Cáceres).
La población reproductora está estabilizada en torno a las 150 parejas, sin embargo la productividad va disminuyendo año tras año, debido al cambio climático.
Es una especie carroñera, que se alimenta de pequeñas presas (anfibios, reptiles, trozos de carroñas, etc.), y es muy sensible a los venenos, uno de sus mayores problemas de conservación. Durante los próximos días, técnicos de varios países se reúnen en Alcántara para hablar de su conservación, bajo el patrocinio de Ecoenergías del Guadiana.
Estos técnicos tratarán este tema en LAS JORNADAS PARA LA CONSERVACIÓN DEL ALIMOCHE EN EUROPA OCCIDENTAL (Portugal, España y Francia) hoy y mañana.
Objetivos de la reunión: